Dead Pigs: entre Hollywood y China

dead_pigs.jpg

Texto: Valentina Winocur (@mevalele)
Intervención de foto: Julia Reyes Retana (@julitareyes)

Dead Pigs (2018) es la ópera prima (y el pase directo a Hollywood) de la directora china Cathy Yan, ganadora del premio Especial del Jurado a Mejor reparto en el Festival de Sundance 2018. Esta película, coproducida con capitales estadounidenses, utiliza como punto de convergencia un incidente real donde miles de cadáveres de cerdos aparecieron flotando en el río Huangpu en Shanghai, arrojados por lxs propixs granjerxs, quienes no podían pagar las tarifas de eliminación de desechos.

Dos años después de este estreno, Yan, quien estudió cine en Nueva York y también trabajó como periodista para Los Angeles Times y el Wall Street Journal, dirigió Birds of Prey (Aves de presa, 2020), una mega producción hollywoodense sobre el personaje de Harley Quinn, protagonizada por Margot Robbie. Esto llevó a Yan a ser la segunda mujer en la historia en dirigir un film basado en un producto de DC Comics, luego de Patty Jenkins con Wonder Woman (2017).

También vale la pena mencionar que el productor ejecutivo de este filme fue Jia Zhangke, uno de los cineastas más importantes de China, quien está involucrado con la política y el desarrollo del cine independiente en su país.

La estructura de la película es el clásico cruce de historias que, en un principio, parecieran no tener nada que ver y, a medida que avanza, nos damos cuenta que están conectadas. Estas vidas muestran la disparidad y diversidad social que se vive en la China actual: la dueña de una peluquería que se resiste a venderle su casa a un corporativo gigantesco llamado Golden Happiness; su hermano, un fracasado perseguido por unos mafiosos; el hijo de éste, que pretende ser un empresario exitoso ante su padre pero es un mesero al que maltratan los clientes prepotentes del elegante restaurante donde trabaja; y, en el otro extremo, la hija del millonario dueño de Golden Happiness quien, rodeada de amigxs y dinero, está completamente sola.

Dead Pigs está en clave de sátira social y política; trata de reflejar las contradicciones de una China que inevitablemente ha caído bajo el ritmo y los choques del capitalismo tardío. Ricos, pobres, “modernidad”, resistencia, tradiciones y redes sociales. Todo junto y en tensión. Pero la crítica que pretende arrojarnos no logra posicionarse del todo; con un guión que no siempre se sostiene y personajes que terminan en el lugar común y lo previsible, la ironía que busca crear se desvanece. Incluso bajo la premisa de ser una parodia de lo superficial, sería necesario que tuviera una perspectiva más profunda, capaz de brincar los elementos más obvios. 

Pueden ver Dead Pigs (¡y muchísimo más contenido de calidad!) a través de la plataforma digital MUBI con nuestro URL: mubi.com/laplumaabominable

Valentina Winocur es mexicana y argentina. Escritora y editora. Estudió Comunicación Social en la UAM Xochimilco y una maestría en Creación Literaria en la Pompeu Fabra. Es feminista y está harta. Obtuvo la beca de la FLM y el FONCA. Siempre anda como quien no quiere la cosa. Pertenece a la generación millenial pero todavía no abre Tiktok. Tiene más preguntas que comentarios. Odia escribir pero le encanta haber escrito.

Julia Reyes Retana es arquitecta, aunque nunca se ha dedicado a la arquitectura. Tiene un taller y marca de costura “Chocochips Costura de Estación” dedicado a la producción de objetos textiles y a la impartición de cursos de costura y técnicas textiles. Dibuja desde que tiene memoria y la ilustración es la base de la que germinan todos sus proyectos, dibujos que se transforman en cosas. Actualmente dibuja todos los días y a todas horas.

Previous
Previous

Habitando las olas: la bienvenida

Next
Next

Mirada en llamas